Diseño de identidad visual para restaurante de cocina oriental. El naming proviene del nombre de un pez centroamericano, lugar originario del cliente que buscaba darle un guiño personal a la marca y que encontró en la sonoridad de las letras k y t, su semejanza con el imaginario sonoro oriental.
Branding y Dirección de Arte
A nivel gráfico se indagó en la estructura de los sellos (seal) que aparecen junto a trabajos caligráficos japoneses. Éstos, son la firma del autor y por lo tanto certifican su originalidad. La marca busca apropiarse de este concepto de autoría y de sus características gráficas: fuerte ortogonalidad, verticalidad y contraste entre forma-contraforma.
La identidad juega con el blanco y el negro como protagonistas. Los opuestos, la simpleza y la dirección vertical de los textos, potencian la marcada ortogonalidad de la marca ofreciendo un marco gráfico que busca contrastar con el vivo color de los ingredientes y decoración de los platos.
Completan la propuesta gráfica una serie de ilustraciones realizadas en acuarela que buscan resaltar el atractivo crómático de los platos.